Cada 8 de junio, el mundo celebra el Día Mundial de los Océanos, una iniciativa de la ONU para concienciar sobre su rol vital. En 2025, en Niza, Francia, se destaca la necesidad de proteger especies marinas y ecosistemas frente a amenazas como la contaminación y el cambio climático.
Historia del Día Mundial de los Océanos
En 1992, durante la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro, Canadá propuso establecer un día para honrar los océanos. La Asamblea General de la ONU oficializó la fecha en 2008, eligiendo el 8 de junio por su simbolismo tras el Foro Global de 1992. Desde entonces, esta efeméride promueve la conservación de los océanos, que cubren 70% del planeta y producen el 50% del oxígeno global. En 2025, el lema “Maravillas oceánicas: sostener lo que nos sustenta” subraya su belleza y urgencia de cuidado. Además, coincide con la Conferencia de la ONU sobre los Océanos en Niza, del 9 al 13 de junio.
Por su parte, la ONU impulsa el Decenio de Ciencias Oceánicas (2021-2030) para fomentar investigación y soluciones sostenibles. Este marco busca revertir el daño causado por actividades humanas, como la contaminación plástica, que alcanza 13 millones de toneladas anuales en los océanos.
¿Qué especies marinas están en peligro de extinción?
Los océanos albergan 230,000 especies conocidas, pero 10% enfrentan riesgo de extinción. La tortuga caguama, presente en el Golfo de México, sufre por la contaminación y la pesca incidental, con una disminución del 50% desde 1960. La pardela balear, ave endémica de España, está en peligro crítico con solo 3,000 parejas reproductoras, afectada por la pesca y su baja tasa reproductiva. Asimismo, el león marino de Steller, en el Pacífico norte, ha perdido 60% de su población desde 1960 debido a la sobrepesca. Otras especies en riesgo incluyen la ballena azul, el delfín gris y el caballito de mar, amenazados por el cambio climático, la acidificación y los desechos plásticos, que matan a 1 millón de aves marinas y 100,000 mamíferos marinos al año.
Por otro lado, los arrecifes de coral, vitales para 500 millones de personas, han disminuido en 50% debido a la acidificación, que aumenta hasta 30% anual. La sobrepesca ha mermado el 90% de las grandes especies de peces, agravando la crisis de biodiversidad. En México, la CITES protege especies como la tortuga caguama, regulando su comercio para evitar su desaparición.
Cuidados urgentes para los océanos
La protección de los océanos requiere acciones colectivas. Reducir el uso de plásticos, optar por productos biodegradables y consumir pescado sostenible son pasos clave. Además, disminuir las emisiones de CO2 mitiga el calentamiento oceánico, que desplaza especies a hábitats inadecuados. Proyectos como Life IP Intemares en España buscan ampliar las áreas marinas protegidas al 10% para 2020, aunque actualmente solo el 1.2% de los océanos está resguardado. Iniciativas como #EUBeachCleanup y la colaboración de Disney con The Nature Conservancy promueven la conservación de especies como la ballena azul y el manatí. Por su parte, la Secretaría de Marina de México impulsa políticas sostenibles a través de la CIMARES, fomentando un equilibrio que preserve los recursos marinos.
Este día llama a la acción global para proteger estos ecosistemas. La Conferencia de Niza 2025 y el Tratado de Alta Mar de 2023 representan avances hacia la sostenibilidad. Sin embargo, la responsabilidad recae en todos: desde reducir plásticos hasta apoyar la investigación, cada acción cuenta para salvar los océanos y su biodiversidad. MV