La diabetóloga-nutricionista Katty Zambrano indica que para la buena conservación de los alimentos, primero es necesaria una buena selección de estos al momento de adquirirlos. Hay que asegurarse del buen estado de las frutas, verduras, carnes y mariscos. En el caso de enlatados es imprescindible observar la fecha de caducidad. Luego de esto, guardarlos en la refrigeradora, donde se mantienen. El congelarlos retrasa el deterioro de los alimentos y prolonga su seguridad evitando que los microorganismos se desarrollen y ralentizando la actividad enzimática que hace que los alimentos se echen a perder.