La jueza del 32 Juzgado del Crimen de Santiago, Blanca Rojas, acusó a Pinochet Hiriart, Óscar Aitken, ex albacea de Augusto Pinochet y a Mónica Ananías, ex secretaria privada del ex dictador, de presentar declaraciones de impuestos "maliciosamente incompletas o falsas". En el antiguo sistema procesal chileno, la acusación es una etapa del juicio que procede una vez terminada la investigación y precede a otra denominada "Plenario", previa a la sentencia de primera instancia. La jueza Rojas investiga un fraude tributario en el marco del llamado caso Riggs por unos dos millones de dólares, de los que el 80 por ciento son atribuidos al ex albacea Aitken. A Marco Antonio Pinochet se le atribuyen unos 203 mil dólares y a Mónica Ananías unos 146 mil dólares. Cuando murió, en diciembre del 2006, Augusto Pinochet estaba procesado por fraude tributario y uso de pasaportes falsos y desaforado por malversación de fondos.