La falta de respuesta a estos planteamientos llevó a los miembros de la Unión de Organizaciones Pesqueras y Productivas Artesanales de Manabí, UOPPAM, a pedir al Gobierno la renuncia del Subsecretario de Recursos Pesqueros, Guillermo Morán, y la presidenta de Autoridad Portuaria, Lucía Fernández. Frank Alvia y Jorge Tobar, dirigentes pesqueros, señalaron que el Subsecretario no ha movido un solo dedo para clasificar las embarcaciones, a pesar de que se comprometió a tener listo el 8 de septiembre el cuadro de diferencias entre naves artesanales e industriales, y nunca los convocaron para trabajar. Dijeron que laboran en condiciones de desventaja porque no hay coordinación entre la Armada y la Subsecretaría sobre el nivel de las naves, para control e instalación del chip. Los 350 botes y barcos pesqueros deben ser clasificados urgentemente, recalcó Alvia. La salida de Fernández la piden porque, aseguran, desde hace 8 meses esperan respuesta al pedido de entrega de la gasolinera de La Poza para convertirla en un centro de despacho de gasolina pesquera y diésel. Hemos tenido reuniones pero nunca se concretó nada para recuperar este espacio convertido en refugio de drogadictos, añadió Tobar. Fernández dijo que el asunto será tratado en sesión de directorio con los pescadores, al mediodía de hoy.