El Gobierno "realizará todas las investigaciones necesarias para averiguar a fondo las causas que originaron la tragedia", aseguró a los medios el presidente mexicano, Felipe Calderón. Al parecer, el piloto de la aeronave informó de una avería a la torre de control del aeropuerto de Ciudad de México momentos antes de perderse toda comunicación. El avión ejecutivo de la Secretaría de Gobernación, tipo Learjet con capacidad para 10 personas, se estrelló hacia las 18H40 locales (00H40 GMT) en un callejón peatonal entre dos edificios aledaños al Paseo de la Reforma, la avenida más importante de la capital mexicana. Según la radio Formato 21, seis de los ocho fallecidos serían ocupantes de la avioneta y los otros dos serían peatones que habrían muerto por el impacto de la aeronave contra el suelo. El choque causó una brutal explosión que también hirió a unas cuarenta personas que se encontraban en el lugar, al menos cinco de ellos de gravedad, e incendió una treintena de vehículos Las llamas alcanzaron algunos cables de alta tensión por lo que una parte considerable de esta arteria central se quedó sin energía eléctrica. Los testigos describieron un escenario dantesco entre la oscuridad. "En mi vida vi un despliegue de médicos, paramédicos y policías como éste. Fue algo horrible. Llegué media hora después del accidente, vi una columna negra enorme y escuché tres explosiones", describió a la AFP Nelly Cabrera. Los medios también indican que en la aeronave murieron José Luis Santiago Vasconcelos, ex titular de la agencia especializado en el combate al crimen organizado y actual asesor en materia de seguridad, y al menos un portavoz de la dependencia además de los dos miembros de la tripulación.