Y a los habilidosos afines al gobierno, inmersos en las altas funciones del Estado por obra y gracia de una voluntad omnímoda pero sin fundamento constitucional, advierten de una postergación del proceso electoral para mayo del 2009, (esto si es que no se les ocurre suspenderlo definitivamente,) por el evidente fracaso y el descarado incumplimiento en la ejecución de obras publicitadas hasta el cansancio en época electoral que no caminan ni se dan, sin que nadie diga nada.