Con todos los problemas que sufre la capital provincial manabita, se suma a esto las discrepancias que han existido entre la alcaldesa de Portoviejo y el señor Prefecto de la provincia, en la que por dos ocasiones, en calidad de habitante y como representante de la Cámara de Comercio de Portoviejo, intervine para buscar un acercamiento entre estas dos dignidades; pero no se pudo concretar aquello, posiblemente por mezquinos intereses de quienes rodean tanto al uno como al otro.