Van 22 días desde que inició el año escolar y a causa del engorroso trámite que tiene que realizar las autoridades de los establecimientos educativos para invertir el dinero asignado por el Gobierno por autogestión hace que las que las instituciones sigan laborando en medio de necesidades. En la escuela Tiburcio Macías por ejemplo los niños siguen recibiendo clases sentados en el piso o ubicándose de hasta cuatro por bancas, ya que hay un déficit de 240 pupitres indicó la directora Monserrate Arauz que aún no puede ser superado.