La primera persona con la que se encuentra es Rosario Moreira, quien abre o revisa la ficha clínica y entrega el turno según el área requerida. Para medicina general la consulta con Rubén Chérrez cuesta un dólar. Se atiende entre 20 y 25 pacientes diarios. En odontología las curaciones cuestan 2 dólares, un dólar la extracción y 1,50 dólares la limpieza dental. El departamento odontológico está a cargo de Ernesto Mendoza y Patricia Arregui, jóvenes profesionales que diariamente atienden entre 8 y 10 pacientes, de lunes a viernes, desde las 08h30 hasta las 13h00. Si la demanda aumenta extienden el horario porque en muchas ocasiones se trata de personas provenientes de las comunidades rurales que no pueden viajar todos los días. Rehabilitación fìsica El área de rehabilitación física, que es el eje de este centro, esta dotado de instrumentos de alta tecnología, como una máquina para magnetoterapia (no se cuenta con más, porque su valor está sobre los 2.500 dólares), con el cual se estimula el sistema nervioso, alivia los dolores como las jaquecas, la depresión y más de 56 patologías diferentes, señaló el terapeuta Digno Sánchez. El centro cuenta con otros instrumentos como la rueda de hombro, bicicleta estacionaria que permite el fortalecimiento en las partes inferiores (tobillos) en pacientes con accidente cerebro vascular, una paralela graduable, reducción muscular, entre otros beneficios. El profesional destacó el uso de balones terapéuticos, una técnica especialmente para la estimulación en los niños con parálisis cerebro infantil, o con síndrome de Down, aunque también la utilizan los adultos para los problemas de columna. AHORRO DE TIEMPO Y DINERO Sánchez, quien brinda servicios de rehabilitación junto con Cinthia Choéz, dijo que se da prioridad a los pacientes de la zona rural. En el centro reciben a pacientes de todas las comunidades de Santa Ana, inclusive provenientes de Olmedo y 24 de Mayo, cantones cercanos, a una hora de viaje, que antes debían viajar a Portoviejo para ser atendidos en el centro de rehabilitación física del INNFA, lo que les significaba un gasto oneroso y más tiempo. Además, algunos pacientes no están en condiciones de realizar viajes largos y eso mermaba su salud en vez de mejorarla. Las tarifas par este servicio varían de acuerdo al tratamiento. Por ejemplo, la gimnasia mecanoterapia y la termoterapia valen un dólar, la electroestimulación un dólar cincuenta centavos y los masajes relajantes cinco dólares.