Rodríguez jugó en Delfín en el 2003. Firmó contrato por un año pero fue separado, según los dirigentes, por falta de rendimiento. Se le debe 18.000 dólares. Di Filipe jugó el año anterior. Tiene salarios pendientes de pago. La deuda es de 6.000 dólares. Cedeño indicó que a los dos se les canceló el 50 por ciento de la deuda y el resto se cancelará en los próximos días. El gerente de Delfín manifestó que una vez solucionado este problema, ya no tendrán trabas para jugar el campeonato provincial de fútbol de ascenso que arranca el sábado 3 de mayo. Dijo que espera que hoy la federación les notifique que ya no tienen denuncias de quejas económicas. Puntualizó que ahora el equipo "ídolo de Manta" se concentra en el ascenso, pues el objetivo es llegar otra vez a la serie B. El plantel sigue trabajando de lunes a viernes en horas de la tarde.