Del Castillo dijo a la prensa, en el aeropuerto de Lima, que “todavía no hemos discutido el tema (de la salida de la CAN)”, el cual considera “un caso extremo”. El primer ministro explicó que García señaló, el martes pasado, que “lo que queremos es un tratado de asociación con la Unión Europea”. Pero que “si el tema es materia de dudas por parte de Bolivia, reticencias y/o restricciones, o poca voluntad de resolver el tema, Perú está dispuesto a tratar el asunto directamente con la Unión Europea”, añadió Del Castillo antes de emprender un viaje de trabajo a la región Puno, fronteriza con La Paz. El jefe del gabinete subrayó que “Perú quiere una negociación bilateral, una negociación directa, pero de ahí a salirse de la CAN hay una distancia”. El alto funcionario insistió en que “no hay una decisión (tomada) al momento”. Las palabras de Del Castillo salieron al paso de las declaraciones hechas por la ministra de Comercio Exterior y Turismo, Mercedes Aráoz, que sugirió una salida del bloque sudamericano, en el caso de que Bolivia persistiese en una supuesta obstrucción al acuerdo con los europeos. Aráoz dijo ayer, en el mismo terminal aéreo, que “mientras Perú, Ecuador y Colombia buscan profundizar su integración en un mercado ampliado, Bolivia no quiere avanzar ni tampoco quiere aprobar nada”. Canciller boliviano responde A raíz de las críticas vertidas en el Gobierno peruano a la postura de Bolivia en las negociaciones con la UE, el canciller boliviano, David Choquehuanca, respondió que es cierto que su país se preocupa por “algunas sensibilidades” que puedan afectar sus intereses y por eso han pedido un trato especial diferenciado. No obstante, descartó que Bolivia se oponga al diálogo “de bloque a bloque”.