El rubro podría incrementarse con el beneficio de la seguridad social que se ofrecerá a los trabajadores que hacen barrido y recolección durante el día y la noche. La cifra exacta que egresa mensualmente para el pago de los 43 contratistas que tienen a su cargo a un total de 500 personas, es 98.883 dólares. Estos recursos provienen de fondos propios, que generan los diversos impuestos que paga la comunidad. “El trabajo de barrido y recolección, permite mostrar a los propios y extraños, una ciudad limpia”, aseguró Vicente Mieles, director financiero. Beneficios El alcalde Jorge Zambrano, dijo que tras haberse reunido con la Inspectoría del Trabajo, se reconoció los derechos de esos trabajadores, en particular la seguridad social, para lo cual se ha pedido a los departamentos jurídico y laboral del Municipio que hagan las consultas ante el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, para conocer los costos del aseguramiento por hora o al destajo, considerando que los dependientes de los contratistas trabajan por horas, señaló. La semana anterior, los trabajadores de aseo protestaron porque reciben bajos sueldos y no tienen seguro. Denunciaron que algunos de sus compañeros fueron suspendidos por intentar agremiarse. Zambrano afirmó que no se ha suspendido ningún contrato. “Lo que estamos haciendo es renovar los contratos vencidos, pero bajo nuevas imposiciones legales, como el caso de la seguridad social”, dijo. Doble turno Los trabajadores de barrido y recolección tienen un salario de 126 dólares. Un caso es el de Juan Carlos Cedeño, quien trabaja en el barrido de calles durante 5 horas en la mañana con un contratista, y en la tarde, realiza la misma labor por un tiempo y salario similares, con otro patrono. La mayoría de los trabajadores tiene los implementos de protección para esta labor y cuidar su salud, pero otros se quejan de no contar con la indumentaria necesaria. Sobre todo, piden chalecos reflectivos para el trabajo nocturno. Eligio Mero, director de la Empresa Municipal de Aseo, comentó que la responsabilidad de la limpieza es de los contratistas, quienes tienen que responder por la obra cierta. “Nuestra unidad a través de sus inspectores supervigila esta acción, para que la ciudad sea atendida de la mejor forma”, señaló.