La policía tuvo que intervenir para deshacer numerosas concentraciones de gente alrededor de Fenway Park, donde los aficionados de los Medias Rojas suelen celebrar sus victorias. Una portavoz policial, Elaine Driscoll, informó que 37 personas fueron detenidas acusadas de alterar el orden público, sin que se reportaran heridos de gravedad. Al menos un vehículo fue incendiado y se registraron algunos desperfectos causados en el mobiliario urbano. Durante las celebraciones de 2004, su anterior victoria en la Serie Mundial, un aficionado murió en los enfrentamientos con la policía. El domingo, la presencia de los uniformados -a pie, bicicleta y a caballo- fue aumentando en distintos puntos de Boston a medida que el marcador era más favorable a los Medias Rojas y se acercaba el triunfo. En otros puntos de Nueva Inglaterra también se sucedieron las celebraciones, aunque tampoco hubo que lamentar graves incidentes. El equipo volvió hoy a Boston para compartir con los aficionados y las autoridades locales el nuevo triunfo. La celebración oficial está prevista para mañana, incluyendo un recorrido de los jugadores por toda la ciudad para saludar a sus seguidores.