Federer se convirtió en el quinto tenista desde 1973, cuando se adoptó el sistema del escalafón de la ATP, que se ubica en el sitio de honor del mundo en cuatro años, después de Jimmy Connors, John McEnroe, Ivan Lendl y Pete Sampras. Es además el cuarto tenista que logra la hazaña en cuatro años o más de manera consecutiva, después de Connors, McEnroe y Sampras. Después de que no ganó los torneos disputados en su país por seis años seguidos, Federer lo ha logrado ahora dos veces en fila, y se embolsó su séptimo título de la temporada, la mayor cantidad en la gira. Federer ganó tres torneos del Grand Slam este año y suma 12 títulos de esa prosapia en su carrera. Es el segundo lugar en ese departamento, sólo detrás de Sampras, quien conquistó 14. El único torneo del Grand Slam que el suizo no ha ganado es el Abierto de Francia. Se repuso Luego de perder la final del Masters de Madrid ante el argentino David Nalbandián, hace una semana, Federer dejó escapar sólo un set en Basilea, durante su duelo de la primera ronda. Luego, resolvió las partidas en sets seguidos. Tiene ahora una foja de 7-4 en las finales que ha disputado este año, y acumula 52 títulos de por vida. Federer aprovechó su primer break point para tomar una ventaja de 2-0, y amplió esa diferencia a 3-0 en menos de 10 minutos. Resolvió el primer set con una volea, en 27 minutos. Nieminen, quien jugó su primera final del año, comenzó a mejorar en el segundo set, y tuvo un break point en el segundo game, pero no logró aprovecharlo. Federer tomó una ventaja de 5-4 y se encaminó a un triunfo fácil. El torneo de Basilea se jugó bajo techo y sobre pista rápida, y repartió 850.250 euros (1,2 millones de dólares) en premios.