Como autora de esta Antología y con la participación de mi hermana Julieta, hemos rendido homenaje a la poética de Delia Petroni de Zevallos y Mariana Petroni A, nuestras siempre bienamadas madre y tía. Poética ofrendada a la memoria de nuestra querida abuela Isabel A.de Petroni y de nuestro amado padre Artemidoro Zevallos M. quienes, descendieron a través de la escarcha lunar para acompañarnos en esa noche de gala. Noche de gala. Sí, digo -gala-. no porque las personas presentes estuvieran vestidas de traje largo y smokin. Gala, porque el alma se vistió con sus mejores galas, tanto las poetas que intervinimos, como el público que nos acompañó. Todos nos envolvimos en la fragancia del verso. Noche de gala, arrobamiento y recuerdos. Tres generaciones, seis poetas tocados por la gracia de Dios, cantándole con un buquet de metáforas a la villa de San Gregorio de Portoviejo. Recordamos la infancia, izando poemas dedicados a la escuela Gran Colombia y Colegio Portoviejo. Al cálido recuerdo del “Happy girls club” famoso en los años colegiales. Se dedicaron poemas a los niños, a las personas queridas, a todo lo que el alma puede sentir y expresar a través de la poesía. Al Dr. Simón Gorozabel, hombre de letras, de ideas solidarias y principios sólidos, mil gracias por sus palabras de acogida y reconocimiento hacia los poetas, igual a los miembros de esta institución y autoridades que nos honraron con su presencia. Mi reconocimiento al periodista y poeta Fernando Macías, quien siempre me da su mano amiga. No podía darse verbo tan preciso para definir nuestra poesía. Hombre de talento y gran sensibilidad. A Damia Mendoza, poeta y cantautora. Infaltable en mis veladas, juntas cabalgamos distancias y hacemos verso al andar. Gracias por tu generosidad.Gracias a César Maquilón por la magnífica conducción de la velada y felicitación al cantante y guitarrista Fabián Cazares, igual a los jóvenes que bailaron tango. Al grupo de amigas que rindió homenaje a las poetas en el Hotel Ejecutivo, mi agradecimiento sincero a vuestra sensibilidad y fidelidad. Dilecto público que nos brindó el cálido beso de la amistad. A Uds. y a Dios les decimos gracias, “Gracias a la vida que nos ha dado tanto...”