En primer lugar, el Tribunal procesa la información que salió de las urnas. La candidatura de Marcos Zambrano, de Pedro Quijije y Jackeline Terranova, no la dio por ganadora el tribunal, sino que fue la voluntad universitaria que se expresó masivamente. En buena lid hemos ganado. No atacamos a nadie, fue una candidatura de altura, defendimos el principio de participación y el derecho de ser elegido entre cuatro listas.

 

 Las elecciones en la Uleam contaron con la observación del CNE, del Consejo de Participación y delegaciones de varias universidades. Yo me someto a la expresión del voto de la comunidad universitaria.

Fui candidato en el 2009 y uno de los candidatos aludidos en esa ocasión me ganó con 16 votos el Vicerrectorado Académico, yo respeté esa decisión y espero que ellos hagan lo mismo esta vez.

 

 En este momento, como candidato y rector electo, tengo la potestad de seguir o no acciones legales, pero en un marco de paz y de un llamamiento a la unidad, no voy a seguir acciones contra las personas que, primero, han querido que algunos jueces cometan fraude procesal, como por ejemplo presentar un certificado de que soy deudor del IESS. Yo participé y gané las elecciones amparado por la ley. Mi título no es de ahora, está registrado desde el 2014, pero también quiero advertir que una vez posesionado en legal y debida forma, estoy obligado por la ley a hacer respetar la institución a la que represento.

 

 Ese es un proyecto que lo conozco por haber sido parte del consejo universitario y del equipo cercano al doctor Miguel Camino. Ya se consiguió un terreno que fue cedido por la Senescyt, ahora tenemos que hacer los estudios, proyectos necesarios y alianzas estratégicas ya sea con el municipio, Ministerio de Ambiente, Subsecretaría de Pesca, Gobierno Provincial,  para así crear espacios de aprendizaje e investigación, de apoyo y capacitación comunitaria para el sector pesquero.

 

 La pandemia nos hizo cambiar el sistema de aprendizaje. En este momento la pandemia nos tiene en procesos virtuales y aún no sabemos cuándo va a terminar, por ello mi compromiso es fortalecer una plataforma tecnológica que garantice la conectividad de todos los estudiantes en toda la provincia, luego dotar a ciertas carreras de simuladores y, a la par, dotar y equipar laboratorios para que los estudiantes empiecen a hacer sus prácticas. Poco a poco vamos a regresar a las aulas.

 

 El doctor Camino logró en cinco años dos acreditaciones, la del 2017 y la del 2020. Estamos acreditados hasta el 2025, pero ahora es tiempo de lograr la internacionalización de carreras, procesos y maestrías. Tenemos un Instituto de Idiomas que será un soporte para ello, por ejemplo. Luego acreditaremos laboratorios para que universidades extranjeras con las mismas carreras que las nuestras puedan acreditar para sacar títulos duales. Esa es la internacionalización en su primera etapa.

 

 Coherente a la realidad y a lo que vivimos, lo primero será la plataforma tecnológica para todos los alumnos, luego laboratorios de prácticas, fincas, espacios nuevos de aprendizaje y luego entraremos a las aulas. La prioridad de gastos en la inversión que se haga será en ese orden.

 

 La reingeniería de personal se hace de manera organizada, planificada, responsable y justa. El doctor Camino dejó los primeros pasos. Tenemos aprobado un crédito del Banco de Desarrollo para desenrolar a 72 personas, pero con sus liquidaciones justas. Otra forma de hacer reingeniería es ascendiendo al personal nuestro, aquellos que hayan hecho maestrías tendrán derecho a optar por ser profesor, en vez de contratar profesores de afuera.