Y no es ningún chiste, sino un duro y crudo secreto a voces, el cual se desató con descaro en media pandemia, sino una muestra con Granda, aprovechándose del IESS con sus sobreprecios en medicinas, y fundas plásticas, otras dos joyitas que aparecieron fueron los Daniel, Mendoza y Salcedo, que ahora dicen ser víctimas de las circunstancias, y para variar creen que el ecuatoriano es idiota para creer semejantes desfachateces, aunque tal vez, existan algunos que les crean a estos tipos. 

En una noche del alma de la patria, en donde las almas angustiadas por la situación que atraviesa su país, y analizan la situación en el país y en el mundo en general, trae otras dos joyitas a la palestra, Ocles, con sus productos con sobreprecio, que ella aduce que “es inocente” y la banda de los Bucaram, que con cinismo y descaro han enriquecido a ellos y un grupo de truhanes que permanecen a su lado, por recibir tajada suculenta, mientras el país, que tanto nombran, tal parece que les vale menos que nada. 

Tenemos enquistados en el Gobierno, ministerios y demás instituciones públicas malas gentes, personajes que no les importa el dolor ajeno ni la muerte de civiles inocentes, lo único que les importa es desviar dinero tuyo, mío, de todos, a cuentas privadas y hacerse ricos de la noche a la mañana.