Ellos no duermen, siempre alerta, en vigilia y con la incertidumbre de que en cualquier momento timbra la alarma, y llueva, truene o relampaguee se levantan para ir al combate contra las llamas y a veces para afrontar fenómenos de la naturaleza: derrumbes, inundaciones, terremotos o cualquier caso fortuito que ponga en riesgo la vida de nuestros hermanos, de los negocios y bienes patrimoniales.

Cuántas vidas han ofrendado los bomberos exponiendo la suya al peligro. Su casaca roja simboliza la sangre derramada de las víctimas, del fuego implacable de los nefastos incendios forestales que individuos irresponsables provocan a veces intencionalmente.

Loor al bombero de Ecuador y del mundo, guardianes permanentes; su entrega frente al peligro y su misión de salvar vidas o inmuebles no es bien reconocida ni recompensada. Algunos carecen de los materiales indispensables; pero también hay que destacar que ellos cuando el peligro lo requiere se unen solidariamente, se apoyan y vencen.

Aquí en la provincia el más antiguo es el legendario Cuerpo de Bomberos de Portoviejo, después Bahía de Caráquez, Manta, Chone, etc. Precisamente en el cantón Sucre, la actividad bomberil desde hace años está bajo el comando del ingeniero coronel Ricardo Ordóñez Uscocovich; hombre de mística y altruismo que ha entregado su vida al Cuerpo de Bomberos hasta llegar a ser su comandante. Hombre sencillo, humilde, con la humildad de los grandes.

Celebramos que en buena hora acaba de ser designado Comandante Provincial del Cuerpo de Bomberos de Manabí, pues se lo merece y que estoy seguro lo honrará con mística de servicio desinteresada. A propósito, en Bahía hace falta que el Cuerpo de Bomberos cuente con un nuevo local y todos los implementos necesarios: motobombas, mangueras, extinguidores, uniformes especiales, etc.

Rindamos pues el más cálido homenaje a los bomberos manabitas y del Ecuador, institución que en forma silenciosa y sin aspavientos cumple con su noble misión, arriesgando su integridad en defensa de la vida y los bienes de nuestros hermanos.

La  palabra benemérito significa digno de un galardón, es por eso que en estas líneas expresamos el merecido galardón a estos sacrificados hermanos.