Uno de los ejes del desarrollo de la capital manabita, según los planes locales, es el fortalecimiento de los servicios de salud. Con cuatro hospitales, más las clínicas, centros de diálisis, laboratorios y establecimientos especializados, el cantón es un centro de referencia y sus casas asistenciales tienen carácter regional.

La crisis ha mostrado la necesidad de aumentar la inversión en salud en el país. Y esto no es solamente en lo público sino que es, también, una oportunidad para el sector privado, por la posibilidad de acceso a créditos.

Portoviejo debe estar pendiente de que haya proporcionalidad en la asignación de los recursos. No vaya a ocurrir, como ya ha pasado, que las mejoras se concentren en ciertas provincias, en detrimento de las demás.

Es necesario constituir un observatorio que esté pendiente de las nuevas inversiones en salud y hacer que esa proporcionalidad se respete. Al mismo tiempo, esa instancia debe gestionar el cumplimiento de las obras pendientes, como la terminación de los hospitales de Manabí.

El Consejo Cantonal de Desarrollo puede tomar la iniciativa para empujar estos procesos. Sería un buen paso si se constituyera en observatorio o ayudara en la conformación de uno.