La cifra de fallecimientos se eleva a 278.892, lo que representa un aumento diario de 8.527, indicó la OMS.

La ola de la pandemia se localiza de forma muy clara en el continente americano, que de un momento a otro debe superar a Europa en el número total de personas que han sido infectadas por el COVID-19.

A los cuatro millones de casos globales se ha llegado cuatro meses después de que se detectara el primero de ellos fuera de China (epicentro y foco originario de la pandemia), que había informado a la OMS de un grupo de casos de neumonías que no correspondían a las conocidas el 31 de diciembre.

A partir de marzo el aumento de casos fue exponencial: el 3 de abril se registró el primer millón de casos; el día 17 ya eran dos millones, y el último día del mismo mes habían aumentado a 3 millones, lo que significa que hoy se llegó a los 4 millones en un menor número de días.

El salto más espectacular de las últimas 24 horas lo ha dado Rusia, que ha pasado a ser el tercer país más afectado, con más de 221.000 personas con COVID-19; por encima de los 220.000 del Reino Unido y de los 219.000 de Italia. EFE