La disposición la dio a conocer ayer el teniente coronel de Estado Mayor Fabián Alvarado, jefe del Fuerte Militar de Manabí. 

Alvarado dijo que desde hoy se sumarán más personal de control y que estas labores las emprenderán junto a personal del Municipio de Portoviejo. 

“No es posible que se siga evidenciando personas que se aglomeran, que incumplen con la medida adoptada en todo el país. Seremos firmes, enérgicos y tomaremos las acciones necesarias”, advirtió el teniente coronel. 

Los controles, según el vídeo que circuló en redes sociales, se darán especialmente en Picoazá, los Florenes y el San Pablo. 

El funcionario puntualizó que esperan contar con la ayuda de la ciudadanía para poder derrotar al coronavirus. 

En la grabación hizo hincapié de que el uso de mascarillas es obligatorio y se debe respetar una distancia de al menos tres metros entre las personas.

En un comunicado de prensa, el Municipio de Portoviejo aseguró que la desesperación de las personas por cobrar el bono de emergencia hizo que se rompieran los protocolos biosanitarios y las medidas de aislamiento social, lo que llevó al Comité de Operaciones de Emergencia cantonal a tomar estas decisiones. 

En un recorrido que hizo este medio con las autoridades de control, en pleno toque de queda, se pudo constatar cómo algunos ciudadanos no está acatando las medidas dispuestas por las autoridades durante la emergencia sanitaria para evitar la propagación del coronavirus, presente en Portoviejo con al menos 25 casos positivos, según cifras del Gobierno Nacional.