Según han informado fuentes cercanas al asunto al diario local 'South China Morning Post', el hombre, que ha sido identificado como Guo, ha sido condenado por un tribunal de la ciudad de Zhengzhou, en la provincia de Henan, que colinda con la de Hubei, donde se originó la pandemia el pasado mes de diciembre.

Así, las autoridades han indicado que Guo había viajado a Italia a principios de marzo para asistir a un partido de fútbol. Sin embargo, cuando se encontraba en la ciudad de Milán el partido se canceló y él cogió un vuelo a Francia.

Llegó a Pekín el pasado 7 de marzo en un vuelo provenientes de Abu Dhabi y volvió en tren a Zhengzhou, donde las autoridades locales han estipulado que aquellos que hayan viajado al extranjero deben someterse a una cuarentena de 14 días.

En este caso, Guo fue a trabajar dos días después de su regreso al gigante asiático, que ha registrado por el momento 3.326 muertos y 82.509 infectados. Aunque el brote de coronavirus se originó en el país asiático, China ha sido adelantada por Estados Unidos, España, Italia y Alemania en número de casos.

El 9 de marzo presentó síntomas como fiebre y dolor de garganta, pero compró medicinas en vez de consultar a un médico. Cuando la Policía acudió a su domicilio, el joven intentó ocultar sus últimos movimientos fuera del país.