El área fue “invadida” por decenas de ciudadanos del cantón al conocer este hecho. Alicia Tigua, una de las ciudadanas, dijo que separaron el área para las personas que realmente necesitan y no tienen dónde enterrar a sus seres queridos. “Nosotros queremos que nos vendan, no que nos regalen. Sería algo injusto que una sola persona compre todo el lugar”, comentó.

Johnny Soledispa, encargado del departamento de Avalúos y Catastro municipal, dijo que hubo muchas especulaciones. “Indudablemente se han registrado varias peticiones de personas naturales que han querido comprar, pero no se ha cristalizado nada”, indicó.

Augusto Fienco, procurador síndico municipal, señaló que hubo la petición de un ciudadano para la venta del terreno, pero “no se va a proceder a la venta de ese terreno porque se ve la necesidad de un interés social”.