Ella se dedica a esta profesión hace 12 años y asegura que desde el mes de enero no ha parado de coser cientos de prendas para varias instituciones educativas de la provincia debido al inicio del ciclo escolar el 22 de abril.

“Aún no sé cuanto tengo invertido porque los pedidos han seguido llegando y sigo cosiendo”, agrega.

Las pacas de ropa están guardadas en fundas plásticas grandes y puestas encima de los muebles y mesas por la falta de espacio. Comenta que su esposo le ayuda a cortar la tela y para darse abasto, ha tenido que contratar a tres personas quienes le ayudan con las costuras.

 

MENOS PEDIDOS. Wellington Armijos pertenece a la Asociación Asoprotexcrema, que reúne a 12 artesanos y que son parte del programa del Gobierno “Hilando el Desarrollo”.

Dicho programa fue impulsado desde el 2007 y consiste en la elaboración de uniformes escolares por parte de artesanos y organizaciones del Instituto Nacional de la Economía Popular y Solidaria (IEPS), para la dotación de forma gratuita a estudiantes de educación inicial y educación general básica de los centros educativos públicos a nivel nacional.

“Al inicio era mejor porque  nos entregaban hasta 800 kits por asociación, pero con el tiempo ha ido bajando y para este año nos han dado 250. Nos toca unos 20 kits por persona”, asegura.

Los kits para educación inicial incluyen: dos calentadores y dos camisetas de cuello redondo; y para educación general básica un pantalón o una falda de gabardina, un calentador, una camiseta de cuello redondo y una camiseta polo.

Este programa prevé la entrega de más de 750 mil uniformes para las escuelas públicas del régimen costa e insular.

En Santo Domingo de los Tsáchilas 180 personas de varias asociaciones son quienes confeccionan los uniformes que luego serán entregados a los distritos de educación.