Teresa Arévalo dice ser una de las afectadas. Ella es dueña de un restaurante donde oferta desayunos y almuerzos, y asegura que cuando hay elecciones las ventas aumentan, pero en esta ocasión han disminuido,  tanto que no ha logrado reunir dinero para pagar el alquiler de su local.

Pérdidas. “Mi negocio está totalmente vacío, cuando no ocurrían estas cosas, a esta hora (12h00) ya estaba lleno, pero desde que empezaron estas elecciones ha sido pésimo para todos nosotros, nos toca cerrar las puertas por las manifestaciones e irnos de aquí”, relató la comerciante.  

Antes de las elecciones, Teresa vendía entre 60 y 70 almuerzos, ahora afirma que no llega ni a 20, es por eso que espera que el CNE termine el conteo de votos y el proceso de impugnaciones para que todo vuelva a la normalidad en el sector. 

Washington López, quien tienen un ciber cerca del sitio, comentó que el movimiento comercial ha muerto por las protestas que se han registrado. 

“La gente tiene temor, las instituciones públicas que están cerca mandan a sus trabajadores temprano a la casa porque esto se vuelve un caos total, lanzan piedras, palos y gas lacrimógeno”, aseguró el hombre.

En esta zona funcionan alrededor de 20 locales de comidas rápidas, desayunos, almuerzos, materiales de construcción, farmacias y tiendas, además hoteles que no han podido abrir con normalidad. 

Asimismo, las calles alternas como la Transversal  principal, en El Mamey; el redondel de la 6 de Octubre, Vargas Machuca y el tramo ampliado de la Juan X. Marcos se han convertido en un caos, pese al control de los agentes de tránsito municipal.