Ayer “Auca”, como es conocido el agricultor, llevó el gigante tubérculo a Paján, donde trabaja en un puesto de venta de legumbres en la esquina de las calles Manabí y Sucre.
La yuca gigante fue expuesta a los transeúntes, que miraban asombrados y hasta se tomaban fotos.
Rebolledo dijo que no iba a venderla porque esa yuca era especial y se la iba a comer hoy en un picante de sardina y un caldo de gallina pata amarilla, platos que a él le gustan.
Eliceo Sánchez, uno de los clientes, quedó admirado del tamaño de dicho tubérculo. “Es la primera vez que veo algo así tan grande, debería ser un récord Guinness” dijo el asombrado ciudadano.