Sus vecinos indicaron que Bazurto se dedicaba a la venta de ropa en las zonas rurales de Manabí, en especial por las montañas de San Plácido, y por lo general llegaba los domingos a su casa en Las Chacras y se quedaba descansando uno o dos días para luego volver a salir a vender mercadería.

El domingo no fue la excepción, dijeron los vecinos. Bazurto llegó a dormir a su casa y ayer en la mañana se levantó y se fue a bañar al río.

Según sus conocidos, en el trayecto de regreso a su casa, a unos 200 metros del río, Bazurto al parecer se percató de que había una falla en el cable que lleva electricidad a una bomba de agua que tenía y se quedó realizando los arreglos.

Los vecinos dijeron que como tenía que elevar el cable y ponerlo en las ramas de unas palmeras, al parecer se le resbaló y le cayó sobre el pecho, lo que causó que recibiera una letal descarga eléctrica.

“Cuando nosotros fuimos a ver lo que pasaba, el cuerpo de él (Ramón Bazurto) estaba echando humo y tenía quemaduras en el pecho”, dijo uno de los allegados de la víctima.

Según los vecinos, llamaron al ECU-911 para pedir auxilio, pero cuando llegaron los rescatistas, más de media hora después, solo pudieron confirmar que Bazurto había fallecido, debido a la descarga que recibió.

“Los rescatistas nos dijeron que habían venido de Portoviejo y por eso hubo demora”, dijo una de las vecinas.

Al lugar llegó después personal de la Policía para realizar el levantamiento del cadáver, el cual fue trasladado al centro forense de Manta para que le realizaran la autopsia.

Ramón Bazurto vivía solo, pues sus hijos habitan en Guayaquil. Él es velado en su casa en Las Chacras.