Los elencos del Astillero, Barcelona y Emelec, no pudieron ganar en la fecha 7 y los técnicos reflejaron su malestar ante los medios de comunicación.
El uruguayo se mostró enojado con el doctor del equipo, Andrés Arce, al no comunicarle que el volante Gabriel Marques estaba enfermo desde el día de la concentración. Almada aseguró que él se enteró durante el entretiempo del partido ante Liga de Quito.
“Es una situación que me tiene bastante molesto. Tuvo un cuadro de diarrea y vómito toda la noche en la concentración, el doctor no me pasó ningún informe y no pudimos tomar los recaudos en el banco”, declaró el DT, al finalizar el cotejo ante los albos.
Almada indicó que al no comunicarle la situación del volante, el equipo perdió marca. Marques estuvo en cancha hasta los 58 minutos y fue retirado en camilla.
“Intentamos que siguiera e hicimos la variante cuando ya no pudo soportar más. Se pensó por parte de la sanidad que no correría ningún riesgo durante el partido, después le afectó bastante”, precisó.
EN EMELEC. El técnico Mariano Soso también se mostró enojado por la derrota del equipo guayaquileño ante Independiente del Valle.
El argentino fue enfático al indicar que sus dirigidos tienen un duelo ante Cruzeiro por Copa Libertadores y por eso se dio el esquema que planteó ante los rayados.
“El equipo hizo muchas variaciones respecto al último partido. Hay plantilla para ser protagonista y realizar una buena Libertadores. En la primera mitad pudimos controlar y neutralizar”, dijo.
Soso reconoció que les pasó factura no poder mantener la presión. “En la segunda mitad al equipo le costó la marca en la zona media. Nos costó controlar el ascenso de los laterales. No pudimos sostener el control para bloquear al rival”, finalizó.