Así lo aseguró la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Diana Atamaint, al inaugurar el proceso electoral en una ceremonia en Quito.
La cifra superó con creces a los candidatos que concurrieron en los comicios más recientes sobre autoridades locales: más de 27.000 en 2004, de 33.000 en 2009 y algo más de 28.000 en 2014.
Según Atamaint, cerca de 300 movimientos y partidos políticos inscribieron a sus candidatos para los comicios, en los que participaron más de 1.500 observadores electorales nacionales y también delegaciones internacionales, entre ellas de la Organización de Estados Americanos (OEA).
En la jornada de ayer los ecuatorianos eligieron a 5.675 autoridades locales y sus alternos entre alcaldes, prefectos, concejales urbanos y rurales, y miembros de las juntas parroquiales donde el censo electoral incluyó a 13.261.994 personas habilitadas para votar.
A la par de las elecciones seccionales, el CNE convocó a 15.363 habitantes del cantón Girón, en la provincia del Azuay a participar en una consulta popular a fin de decidir si permitirán o no las actividades mineras en el páramo de Quinsacocha.
Demoras. En Santo Domingo de los Tsáchilas el proceso electoral se desarrolló con normalidad, aunque hubo descontento por el retraso de muchos sufragantes que demoraban hasta 15 minutos para votar.
“No es posible esperar tanto. Hubo campaña para conocer a los candidatos y saber por quién votar, no podemos demorarnos acá”, puntualizó una ciudadana. 2,69 millones de empadronados no estaban obligados a sufragar. En ese grupo se encontraban 1’508.161 adultos que tienen más de 65 años de edad, y 664.502 jóvenes de entre 16 y 18 años, según El Comercio.