Recordó que muchas veces tuvo que cerrar su puesto para evitar que se mojara su mercadería.
Él vende de ropa femenina desde hace más de trece años en la calle Octava, entre June Guzmán y Marco Quintana.
“Yo creo que sí estoy mejor que antes porque ya tenemos cubierta y pagamos los mismos 50 centavos diarios que hasta ahora”, indicó el comerciante.
Andrade forma parte de los 96 vendedores que ocupan los cubículos ubicados en este sitio, de los cuales en 20 atienden los vendedores de comida, quienes se rehusaron a cambiarse hacia la zona del malecón.
Llegada. Desde el pasado viernes de la semana anterior varios expendedores hicieron posesión de sus respectivos puestos.
Una vendedora de comidas, quien prefirió no dar su nombre, indicó que la mayoría de comerciantes de comida se asentaron en el sitio con la finalidad de estar en el lugar de manera provisional.
Algunos de ellos, a diferencia de los de ropa, pretenden reunirse con la próxima autoridad municipal para que se les construya un área destinada para la asociación de vendedores de alimentos preparados.
Por su parte, el director de Obras Públicas del Municipio de Quevedo, señaló que se incluyó a los expendedores de productos comestibles, luego de que ellos se resistieran a ir a otros espacios.
“Cedimos a la petición de los comerciantes, los trabajos finalizaron hace una semana e inmediatamente ellos ocuparon los espacios”, agregó Basantes.
El funcionario destacó que los cubículos que permanecen en la zona del malecón serán arrendados a otros comerciantes que estén interesados.
Sobre las estructuras metálicas del malecón, el alcalde jorge Domínguez, indicó que cada arrendatario deberá adecuar un sistema inhibidor de calor, para protegerse de las altas temperaturas.