En la última semana el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana declaró el estado de emergencia en las provincias de Carchi, Pichincha y El Oro por el éxodo venezolano.
Ciudades de estas provincias han recibido en las últimas horas a migrantes venezolanos. Los “chamos” han copado algunos terrenos de la capital ecuatoriana en las cercanías de la terminal terrestre de Carcelén.
El Municipio de Quito dispuso en las últimas horas el trasladado y refugio a cerca de 200 inmigrantes venezolanos que permanecían en ese lugar y los ha reubicado en seis centros de acogida temporal.
La alcaldía había declarado el viernes la situación de emergencia humanitaria a raíz de la afluencia masiva de venezolanos y su situación de vulnerabilidad.
El presidente Lenín Moreno se refirió ayer al éxodo de venezolanos. El Jefe de Estado afirmó que su gobierno desarrollará acciones para proteger y apoyar a los ciudadanos de Venezuela.
“Ecuador es un ejemplo de movilidad humana”, dijo el Presidente, a su tiempo de pedir tolerancia a los extranjeros. Moreno recordó que antes hubo un éxodo similar de migrantes ecuatorianos hacia Venezuela por la situación económica del país. El mandatario exhortó a entender a los desplazados venezolanos.
Guayaquil. A la terminal terrestre de Guayaquil también llegan los “chamos”. Unos 500 venezolanos llegan cada fin de semana a ese lugar. Allí sus compatriotas los reciben con tarrinas de comida, agua y un refugio para descansar y seguir su travesía.
Según datos facilitados por la Cancillería, sólo 72 mil de los más de 500 mil venezolanos que han ingresado a Ecuador durante el 2018 se han quedado.
La profunda crisis económica y social que vive el país gobernado por Nicolás Maduro y el temor de un cierre de la frontera en Colombia y Brasil ha motivado que los venezolanos se desplacen en grandes cantidades a la frontera con Ecuador.