En las vías Guayaquil y Manabí (las de mayor movimiento) se registró un flujo normal de personas, la mayoría de ellos adquiriendo productos de primera necesidad, la misma situación de vivió en los dos mercados municipales. 

Martín Izquierdo, quien llegó desde el recinto San Pedro (vía a Quevedo), manifestó que adelantó el día de sus compras (las realiza todos los domingos) porque para esta tarde esperaba a una de sus hijas, quien llegaba desde Guayaquil a pasar estos días. 

“Le dije que venga, ya que no podíamos ir porque no teníamos plata”, sostuvo. 

Diego Vera, oriundo del recinto El Porvenir (vía Guayaquil), comentó que aprovechó para comprar unos útiles escolares que le hacían falta a su hija, que cursa el décimo año de educación básica.

“Ya que ella no tiene clases, salimos hoy para comprar unos zapatos, un libro, unas cartulinas, marcadores y a hacer una consulta en internet”, refirió el hombre, quien agregó que no viajaba hacia ninguna parte porque no tenía dinero para hacerlo. 

Viajes. En las paradas provisionales (vía Guayaquil y Manabí) tampoco hubo gran movimiento de personas. Pocos pasajeros viajaron hacia Guayaquil, mientras que otros iban  a Quevedo a realizar algún tipo de compras. 

“Voy a Quevedo solo a comprar unos zapatos y me regreso”, refirió Maritza Mendoza, habitante de la cooperativa La Independencia. 

“Me estoy yendo a Manta porque una amiga está de cumpleaños, pero me regreso mañana (sábado), no hay plata para quedarse mucho tiempo”, sostuvo Irene Corrales, antes de subirse a una unidad de la cooperativa Reales Tamarindos.