El triste hecho ocurrió en el sitio Estero Ancho, de la parroquia Chibunga del cantón Chone, pero por la cercanía, el procedimiento legal fue realizado por agentes de la Policía del cantón El Carmen, se indicó.

Relato. El viernes, aproximadamente a las 16h30, el conviviente de Dioselina, Francisco Ramírez, volvía del trabajo, con la expectativa de que su esposa lo recibiera como todos los días, pero esta vez eso no ocurrió.

Cuando el hombre entró a la casa miró una escena que en ese momento le destrozó el corazón, dijo a la Policía.

Su esposa colgaba del cuello con una soga azul atada a una de las vigas de la casa de madera. 

La escena fue desesperante para el hombre que, en su afán de salvarle la vida a su mujer, la bajó y la puso en el piso de la sala para intentar reanimarla.

Ahí el esposo comprobó que la mujer con la que se había unido para formar un hogar lo había dejado solo en el mundo, y sin darle a conocer las razones de su fatal decisión.

La noticia se difundió por todo el sector y los vecinos dieron aviso a las autoridades sobre lo sucedido.

Agentes de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased), de El Carmen, realizaron la inspección del lugar de los hechos.

Los uniformados explicaron que encontraron a la mujer en la sala de la vivienda, donde según su esposo la había colocado. 

El cuello de la mujer presentaba un surco incompleto (huella de ahorcamiento), detalla el reporte.

El cadáver fue trasladado al centro forense de Santo Domingo de los Tsáchilas para que le realizaran la autopsia y conocer más detalles sobre la muerte.

Los familiares se mostraron tristes y sorprendidos porque jamás imaginaron que la joven mujer, que tenía toda una vida por delante, llegara a suicidarse.