Las autoridades revelaron que la hermana más joven asestó al hombre al menos 35 cuchilladas en el cuello y el pecho. Las otras dos chicas lo golpearon la cabeza y le rociaron la cara con gas pimienta.
La tragedia ocurrió el pasado 27 de julio, cuando el cuerpo de Mijaíl Jachaturián, de 57 años, fue hallado en su domicilio del norte de la capital rusa.
Según explicó Yulia Ivanova, representante del departamento principal de investigación del Comité de Investigación de Rusia, las muchachas, nombradas en los medios como Anguelina, Kristina y María, son acusadas de “homicidio cometido por un grupo de personas con una colusión previa”.
Las muchachas revelaron que sufrían palizas sistemáticas a manos de su padre. A menudo, a causa de los moretones y heridas que tenían en la cara, no podían ir a la escuela. “Además, según ellas, el padre las amenazaba constantemente. Hace unos años, a causa de estas amenazas, la madre de las adolescentes huyó de casa.