Ellos aseguran que en los últimos días han sido impedidos de subir a las unidades.
Los conductores prefieren cerrar las puertas debido a la prohibición de las entidades de tránsito que impide llevar personas paradas en los pasillos.
Los vendedores mencionan que ellos deben ir de pie para poder vender pero los colaboradores no les permiten hacerlo por las multas y sanciones que reciben.