Como de  costumbre, salió de su casa, ubicada a 50 metros del río para asearse, pero esta vez la muerte lo sorprendió. 

Una niña que caminaba hacia el afluente a coger agua encontró el cadáver. 

Según familiares del fallecido, la menor observó que Alfredo estaba sentado en la orilla con la cabeza sumergida en el río. 

Aterrada, la menor informó a sus familiares, quienes sacaron el cuerpo del agricultor.

Estaba enfermo. “Él sufría de ataques epilépticos desde hace un año, se estaba haciendo tratamientos médicos, pero le gustaba el licor,  eso pudo causarle daño. Fue mi hija quien lo encontró muerto cuando iba a recoger agua para la cocina a las 07h00 de hoy (ayer)”, contó Pilar Salazar, prima del fallecido.

Al sitio llegó la Policía y elementos del Cuerpo de Bomberos, quienes trasladaron el cuerpo a la morgue de Ventanas para la autopsia.

Según el médico forense, un infarto habría ocasionado la  muerte de Alfredo cuando se lavaba los dientes, provocando que su cabeza quedara sumergida en el agua.

Familiares de Alfredo indicaron que el hombre estaba soltero y no tenía hijos. 

“Él se dedicaba al trabajo en el campo, era tranquilo, pero sí le gustaba era el trago”, dijo Salazar.

Luego de la autopsia el cuerpo del agricultor fue llevado a casa de sus parientes en el recinto Guapara, del cantón Urdaneta, donde será sepultado.