Dídimo Arteaga, dueño de un mini market en las calles Colón y Ricaurte, dijo que actualmente las ventas han disminuido debido a los trabajos de regeneración de la zona histórica, por lo que ahora esperan que con la inauguración del parque, prevista -según el municipio- para mediados de enero, el sector se empiece a reactivar.

Dijo que ya recorrió el parque y pudo notar que está muy bonito, eso los anima a pensar que atraerá a muchas personas que luego necesitarán de agua, alimentos y más que ellos venden.

Vicente Rodríguez, quien trabaja en un local del sector, mencionó que la aspiración de todos los comerciantes del lugar es que las cosas ya mejoren porque recordó que con los trabajos de regeneración de las 11 manzanas que se realizan, la cantidad de clientes ha disminuido, al punto de que las ventas han bajado al 10 por ciento.

Gustavo Pisco, de la panadería El Edén, en la calle Ricaurte, mencionó que las expectativas del sector comercial son altas, sobre todo luego de lo que ha pasado con los trabajos de regeneración. 

Dijo estar optimista que la situación empiece a cambiar.

Analiza. En cambio, Marlon Santana mira las cosas con más cautela. 

Es dueño de la cevichería Pez y Limón, que está diagonal al nuevo parque,  y mencionó que si bien un parque de este tipo convoca a probables clientes también recuerda que el municipio puede tomar decisiones que fortalezcan los negocios que estarán dentro del parque y con ello prohibir que otros alrededor de la nueva obra sigan funcionando o les podría limitar el área de funcionamiento. 

Destacó que si bien a los vecinos el parque los puede motivar a invertir para mejorar, deben esperar las decisiones de las autoridades para ellos también definir el camino a seguir.

Las autoridades del municipio informaron que el parque estará listo a mediados de enero con la intención de que llegue el presidente de la República, Lenín Moreno. Inicialmente debió estar en septiembre del año anterior.

En todo caso, los comerciantes indican que la inauguración del parque ahora les ayudaría poco, pues en todo el casco histórico de la capital manabita se realizan trabajos de regeneración de calles los cuales se prevén terminar en mayo, con lo cual es difícil que los clientes accedan a lugares como la iglesia La Merced, el parque Central o el Sindicato de Choferes.