En las últimas semanas las historias de dos niños lojanos impactaron al país.  Primero cuando se conoció el caso de Emilia, de 9 años, quien al salir de la escuela se fue con un “conocido” y nunca más volvió a casa.

El segundo caso, el de Juan, estaba reportado como desaparecido y a los tres días fue encontrado y dijo que se había ido de casa porque supuestamente fue maltratado.

“La familia es la célula de la sociedad y de ahí parte todo”, expresa el coronel Ponce al referirse a los cuidados que se deben dar a los niños desde el hogar.

Señala que aunque en Manabí no se reportan casos de niños desaparecidos, es importante recordar a los padres que deben estar pendientes de ellos.

“Muchas veces por las ocupaciones diarias se los descuida, pero si el padre y el hijo tienen confianza, el niño contará todo y sabrá que siempre puede contar con ellos”, comenta el jefe policial.

 

Seguridad. Aunque la Policía es un complemento para la seguridad de los ciudadanos, el coronel menciona que son los padres quienes deben inculcarles a sus hijos cómo y con quién pueden estar más protegidos.

Por ejemplo, Rocío Andrade cuenta que en la escuela de su hijo, que es particular, no dejan que los niños salgan si no es con la presencia de sus padres o de una persona que esté oficialmente encargada ante las autoridades de la institución.

En algunas escuelas la seguridad de las mismas está a cargo de guardias privados.

Desde la compañía Hutoda se recomienda que las escuelas deben tener cámaras de seguridad para que puedan estar pendientes de los movimientos de los menores, ya que, aseguró,  no todos los guardias o docentes pueden estar 100% pendientes, señala Jorge Aguilar, gerente de esta empresa.

La psicóloga Isabel Valdiviezo menciona que también es importante la seguridad de los niños en todo ámbito, incluido el de internet.

Por ejemplo, evitar la difusión de fotos de los menores con información de dónde estudian o tomar fotos con el uniforme de los mismos como medida de prevención ante estos casos. También estar pendientes con quiénes se escriben nuestros hijos, pues ella recuerda que también existen personas mal intencionadas que utilizan las redes sociales para conocer información personal.

“Es más recomendable que nuestros niños no tengan cuentas en redes sociales o las frecuenten, porque un niño debe preocuparse por cosas como jugar en vez de subir fotos o emitir información que puede servir para que otras personas hagan daño”, expresó.