medio centenar de albañiles  esperan ser contratados en la obra de soterramiento eléctrico en la “zona cero” de Tarqui.

La mayoría de los aspirantes son de Tarqui y del barrio La Ensenadita. Carlos Galarza lleva tres semanas esperando ser contratado, pero aún no se concreta aquello. 

Él cree que el contratista de la obra debe priorizar a los obreros de Manta, y en particular a quienes viven en los alrededores de la “zona cero”. “No queremos que se nos deje de lado, como ha sucedido con los otros proyectos ejecutados y en construcción, donde se contrata gente de otros lados del país y hasta extranjeros”, manifestó.

Galarza tiene seis meses sin trabajo. Cree que la construcción privada tras el terremoto de abril del 2016 entró ahora en crisis, porque no hay contratos nuevos.

Carlos Caicedo es otro maestro de la construcción que espera ser contratado. Aspira a ganar la jornada diaria fijada para los trabajadores de la construcción: 40 dólares el día para el maestro y 20 para el oficial.

 

>contratista. Patricio Pesantes, técnico de la empresa contratista Felipe Calderón, manifestó que hasta que no lleguen todos los equipos y materiales no pueden contratar personal. 

“No queremos abrir zanjas y tenerlas abiertas. El objetivo es abrir e ir cerrando”, dijo. 

Indicó que a medidos de este mes llegará un gran porcentaje del material para las obras. Actualmente trabajan con técnicos de topografía en la medición  y  corte de la vías en las 19 manzanas señaladas.

Aseguró que habrá prioridad para los trabajadores de Manta, por eso están analizando las carpetas recibidas e incluso ya se ha solicitado nuevos documentos. El proyecto cuesta 7,5 millones de dólares.