Desde hace dos meses en uno de los predios del sector permanecían tres perros en situación de abandono.
Se trata de un rottweiler, y dos perros mestizos. El más pequeño, debido a la falta de agua y comida, permanecía casi agonizante.
Ante esta situación los habitantes del lugar se contactaron con las autoridades para que colaboren en el rescate de los animales, pero aseguraron que no tuvieron respuestas positivas.
Uno fue retirado. Ayer, el sol complicó el estado de salud del perro más pequeño y obligó a un grupo de vecinos a volver a insistir para que la Unidad de Fauna Urbana del Municipio los ayude. Pero tampoco fue posible.
Las negativas motivaron a los presentes a organizar un improvisado rescate.
Ellos entraron hasta el predio y, con la ayuda de una cuerda y un saco, sacaron al animal casi moribundo.
Betty Recalde, moradora, dijo que el rescate se realizó con la ayuda de un familiar que es veterinario.
“Los perros estaban botados, mi hijo les daba de comer, incluso uno de los animales se había caído a la lavandería. Les estamos rescatando. Parece que los dueños se han olvidado de ellos”, comentó.
Añadió que personas del municipio “vinieron, luego volvieron a venir, pero no hicieron nada, no está bien entrar a una propiedad sin permiso, pero había que salvar una vida”, declaró.
Al momento del rescate en la propiedad donde estaban los canes no había nadie.
Ernesto Toalombo, dijo que los animales tienen algún tiempo abandonados. “Con mi familia venimos a darles de comer en las noches”, manifestó.
Los vecinos les dieron agua a los dos perros. Dos de ellos aún permanece en le terreno. Mercedes Verduga, veterinaria, se hizo cargo del can pequeño. En un vehículo de un voluntario llevaron a la mascota hasta la veterinaria para que reciba atención de urgencia. Su condición era crítica, tenía heridas en la cabeza y estaba muy bajo peso.