Crearán 40 universidades técnicas y tecnológicas con una inversión de $ 200 millones. Sostendrán la inversión del 2% del PIB. 

El plan de trabajo de Moreno habla de mantener la gratuidad de lo público, “es un derecho, no una mercancía”, anotan. Continuarán con las escuelas del milenio planificadas, pero evaluarán la política de reordenamiento de la oferta, para invertir en mejoras de escuelas comunitarias. 

“Mejoraremos los sistemas de educación intercultural bilingüe y atenderemos los problemas del transporte escolar rural”, señala documento.

También indica que seguirán construyendo escuelas del Milenio.

“A la par, se debe continuar incrementando la cobertura en educación inicial y bachillerato en todo el territorio nacional. Es necesario concluir con el proceso de implementación de las Unidades Educativas del Milenio y el fortalecimiento de la infraestructura escolar en los distritos y circuitos educativos”, indica.

El candidato oficialista también propone bibilotecas. “Combatiremos la segmentación educativa entre las áreas urbanas y rurales, e impulsaremos la construcción de bibliotecas comunitarias que fomenten el hábito de la lectura, como una forma de recreación”, señala.

El candidato presidenciable, Guillermo Lasso, tiene un criterio diferente respecto al ingreso a las universidades.

“Nuestra propuesta es darle autonomía y libertad a las universidades para que apliquen sus sistemas de admisión”. La propuesta es reformar la LOES y suprimir la Senescyt. 

El plan de trabajo propone algo opuesto a lo vigente en educación media. Plantea el método de ‘váucher educativo’. Se trata de un mecanismo de subvención estatal por alumno. Con esa subvención, los padres podrán inscribir a sus hijos en planteles privados. Este mecanismo -explica el equipo de Lasso- se ha aplicado en Chile, para “hacer frente a problemas de calidad que existían en escuelas públicas”. No se detalla de cuánto será, ofrecen una etapa de discusión antes.

Para la evaluación de las universidades propone un ente independiente para que sean evaluadas.

Lasso también propone un estudio de las mallas curriculares del país “para ajustarlas a la realidad y lograr la intencionalidad educativas de las asignaturas”.

Plantea un acceso a la matriculación escolar que “incluya a todos los niños y jóvenes de las diversas identidades culturales.

“Nuestra propuesta se basa en la implementación de un mecanismo, que empodere a los padres con la capacidad de escoger la educación que consideren adecuada para sus hijos”, indica.

En varias ocasiones ha señalado que reabrirá las escuelas en las zonas rurales y que con eso vendrá la contratación de más maestros para estas zonas.

También continuará con el programa de becas en el extranjero, por lo que promete “incrementar los fondos asignados para que aumente el número de beneficiados”.