Amanda Roberts tiene 23 años y perdió 68 kilos tras dos años de un estricto régimen. Sin embargo, ella sorprendió al mundo al mostrar "el otro lado" de su radical cambio.
Ella se autodenomina como la "reina de la piel suelta", debido a los 9 kilos de piel que cuelga de su cuerpo.
Amanda ha decidido mostrar su cuerpos a través de la red social Instagram, donde generalmente se ven los casos maravillosos de mujeres obesas que se transformaron en supermodelos.
Sin embargo, según explica Amanda, aquellas mujeres nunca suben fotos de "el otro lado" de su cambio, ese donde toda la piel que sobra se ve en primer plano. Todas se fotografían después de las cirugías.