Gema Márquez, habitante del lugar, manifiesta que la pestilencia que emana de una alcantarilla rebosada es “insoportable”.
El problema se acentúa en las mañanas y tardes que hay más viento, detalla Márquez.
“Es insoportable. No podemos dormir, ni comer. No soy la única que vive allí, somos muchas familias, queremos que nos resuelvan este problema”, cita.
Márquez detalla que no es la primera vez que sucede el rebose.
“Siempre se tapa, no lo soportamos más”, comentó.
Espera que las autoridades puedan reparar el daño lo más pronto, pues asegura, también son parte del cantón y las obras deben llegar por igual.
“Veo obras en todos lados. Ya es hora que llegue una a mi sector, a El Florón 5”, concluyó.