La primera ministra británica, Theresa May, reiteró ayer ante la canciller alemana, Angela Merkel, que “brexit significa brexit”, pero señaló que su país necesita preparar esas negociaciones y tener “claros” sus objetivos, por lo que no invocará el artículo 50 del Tratado de Lisboa antes de fin de año.
En rueda de prensa en Berlín en su primer viaje al extranjero como primera ministra, May aseguró que su país respetará mientras sea miembro de la Unión Europea (UE) “los derechos y obligaciones” que ello implica y garantizó que el “brexit” no significa alejarse de los socios europeos, con los que desea mantener relaciones “fuertes” y “constructivas”.