Eduardo Pinargote, comerciante de frutas desde hace aproximadamente quince años, indicó que en otros años han enviado hasta 50 mil naranjas, cada tres días, a ciudades como Portoviejo y Manta, pero que en este año ese número se ha reducido casi a la mitad.

Pinargote dijo que él aparte de tener su local en el mercado, recorre los campos comprando la fruta, y se ha dado cuenta que en esta salida de invierno un árbol de naranjas no da más de 300 a 500 unidades aproximadamente, y en época buena de cosecha un árbol llega hasta 1.500 naranjas, comentó. 

En la actualidad la producción de naranjas que llega de los campos es sólo para el consumo local, sostuvo. 

El ciento de naranjas lo están pagando a seis dólares.