Llegó en el 2013 al cuadro “Ídolo del Puerto” con Gilberto Quiñónez, entrenador que inició el camino del Delfín para salir de la segunda categoría. 

Por agosto el equipo estaba en riesgo de quedar eliminado, y llegó Néxar Zambrano a terminar el camino de regreso a la Serie B.

Caicedo seguía en el equipo con Jorge Pinos como arquero principal y Mathew Peñaherrera como segundo arquero.

Al siguiente año, en la Serie B, siguió junto a Zambrano, pero Zambrano quedó fuera del equipo por problemas con la dirigencia. Sin embargo, Caicedo se quedó preparando a arqueros como Paolo Ortiz y al mismo Peñaherrera, ya con el paraguayo Raúl Duarte como entrenador.

En agosto de ese mismo año los malos resultados ocasionaron la salida de Duarte. Llegó Cirilo Montaño con su preparador físico y Caicedo siguió firme en el puesto hasta final de temporada, en la que Delfín no pudo lograr el ascenso a la Serie A. La dirigencia ya estaba encabezada por José Delgado en lugar de Alberto Rodríguez.

 

 El año pasado se anunció a Fabián Bustos como entrenador y también llegó con su asistente técnico y su preparador físico, pero el preparador de arqueros seguiría siendo Carlos Caicedo, y así logró el ascenso a la Serie A. En abril pasado Bustos se fue del equipo, y Caicedo continúa en el Delfín con Diego Alarcón.

Ayer el también arquero del Delfín en el 2010 contó que a veces es complicado adaptarse a cada cambio de técnico, pero él lo ha superado y todo es producto de su trabajo y lealtad.

Siempre trata de armar un buen grupo con sus arqueros. Por eso acuerdan que en cada quincena uno invite al grupo a comer ceviche y así mantienen la unión. Considera que ha dado resultados. Con quien le costó meterlo de lleno al grupo fue Cristhian Arana, quien ya no está más en el plantel.