Junto a ella estaba Morla García friendo las empanadas de queso y pollo que los visitantes pedían. 

La señora dijo que elabora empanadas “desde que tengo uso de razón”. Hizo 500 y las vendió todas.

 

>INICIATIVA. Sara Fernández, directora municipal de Turismo, informó que participaron 26 expositores que fueron capacitados en calidad y seguridad alimentaria para la exposición, que atrajo a miles de personas no solo de Portoviejo, sino de otros cantones.

Los visitantes pudieron degustar empanadas de plátano y harina y otras delicias de la gastronomía manabita como tonga, gallina criolla, dulces de Rocafuerte, bollo, que fueron vendidos en stands.

No faltó la música de grupos locales en un evento que tuvo la colaboración del Gobierno Provincial de Manabí con logística como carpas, mesas y artistas, señaló María de los Ángeles Gómez, de la dirección de Turismo y Ambiente de la Prefectura.

>PARROQUIA. El GAD parroquial también estuvo al frente de la organización. Su presidente, Ricardo Mantuano, señaló que actividades de este tipo contribuyen a mover la economía de la parroquia.

Anunció que con los 100.000 dólares de un crédito no reembolsable del Banco de Desarrollo construirán un coliseo para actividades deportivas y de otro tipo. Ese lugar también puede servir como albergue provisional en caso de eventualidades, indicó.

El ambiente fue de fiesta en Alhajuela. 

Familias enteras y amigos llegaron atraídos por el buen sabor de la cocina manabita.

Narcisa García y su amiga Laurentina Vélez llegaron temprano desde Montecristi. Desayunaron empanadas y esperaron para almorzar en el mismo sitio.

García dijo que lo que importa es que “este sentimiento que se ha despertado tras el terremoto se quede para toda la vida porque nos une”.