El entrenador de Boca Juniors, Miguel Russo, dijo ayer que el club argentino no fabricó ni alquiló la densa niebla que dificultó la visibilidad en el partido en el que goleó al Cúcuta colombiano y se clasificó finalista de la Copa Libertadores. Por su parte, el delantero Martín Palermo señaló que Gremio de Brasil, el rival en la final del torneo, “es un equipo fuerte, pero también vulnerable si se lo ataca”.