La campaña que lleva el Ministerio de Educación en contra de quienes hacen sus necesidades biológicas en las calles, denominada “No más meones”, dirigida especialmente a los taxistas, originó la migración de ellos.
Desde la semana pasada, cuando la medida se puso en marcha, se evidencia que los meones dejaron de concurrir a sus lugares preferidos. Ahora se los encuentra en los accesos a Las Orquídeas por la calle de Río de Oro.
Leonor Álava lamentó que el acceso a su casa se lo use como urinario.