Portoviejo en cambio tiene 231 edificaciones demolidas y 26 que le restan por demoler; Pedernales, epicentro del terremoto, tiene un total de 549 demoliciones y le resta solamente 1.

Estos números comparativos indican que Manta fue devastada en infraestructuras más que cualquier cantón, ubicándose la mayor incidencia de destrucción en la parroquia Tarqui, denominada "zona cero", que tuvo 63 manzanas acordonadas y se que se están liberando poco a poco, informó el Municipio de Manta a través de un boletín.

“La inversión en Manabí en demoliciones es de 14 millones de dólares, que también comprenden trabajos de plataformas de los albergues. Por demoler faltaría un 40% en la provincia, esperando que no se siga incrementando las liberaciones de áreas en los cantones” informó Marcel Guillén, gerente de proyectos de la Reconstrucción de Manabí.

De acuerdo a la emergencia el proceso de demoliciones se acabaría el 16 de julio, pero se ha hecho la proyección para que culminen en septiembre, detalla el documento. Por ello Guillén solicita a los dueños de predios acudan para que los técnicos evaluadores aceleren el proceso y los municipios emitan las resoluciones jurídicas y el MTOP pueda realizar las demoliciones.

El funcionario señaló que la afectación de Manta es considerable, especialmente en la parroquia Tarqui, y en lo que respecta a la ciudad se la está manejando sectorizadamente, aunque se sigue realizando liberaciones por parte del Municipio.